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Del videojuego a la pista: cómo Gran Turismo creó un piloto profesional
De los controles de PlayStation en Gran Turismo, al volante de carreras. La increíble historia de Jann Mardenborough.
En los rincones de Cardiff, Gales, nació una historia que desafía toda lógica. Jann Mardenborough, transformó un pasatiempo juvenil en una carrera profesional que cambiaría para siempre la forma en que el mundo ve el automovilismo.
Todo comenzó una noche de Guy Fawkes en 1999. Mientras otros niños miraban los fuegos artificiales, Jann descubrió su pasión en una PlayStation, conduciendo un Mitsubishi 3000GT rosa en el videojuego Gran Turismo.
“Creo que los coches son la máxima expresión del individualismo y la libertad”, confesaría años después.
De Jugador a Piloto Profesional
En 2011, con 19 años, Mardenborough participó en GT Academy, un programa revolucionario de Nissan y Sony que buscaba convertir gamers en pilotos reales. De entre miles de competidores, fue seleccionado como el ganador.
Su transformación no fue sencilla. Meses de entrenamiento profesional lo llevaron a obtener su licencia internacional de competición, pasando posteriormente a su primera gran prueba: Dubai 24 Hours, su primera carrera de resistencia, terminando de tercero y demostrando que no era solo un gamer aficionado, sino un piloto con futuro.
El punto de inflexión llegó en Le Mans 2013, donde logró estar en el podio de la competencia confirmando que no era solo un experimento, era un verdadero talento tras el volante.
Un Camino Marcado por la Tragedia
En 2015, su carrera enfrentó su prueba más difícil. Durante una competencia en Nürburgring, un accidente trágico le costó la vida a un espectador, a pesar de que Mardenborough sobrevivió, el golpe emocional fue profundo.
“Forma parte de mi historia”, diría después, demostrando una madurez que va más allá de la pista, tras lo sucedido.
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Más que una Historia de Éxito
Lo extraordinario de Mardenborough no es solo haber pasado de gamer a piloto profesional, sino haber transformado una oportunidad única en una carrera legendaria.
Posteriormente, la historia de este piloto inspiró la película Gran Turismo, que, aunque presenta algunos cambios en el guion, sigue siendo fiel en su mayoría a los eventos reales. La historia de Mardenborough continúa siendo una fuente de inspiración para muchos aficionados y jugadores, demostrando que los sueños, aunque inusuales, pueden hacerse realidad.
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