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Test Drive: esto es lo que encontramos en el Audi Q8
El Audi Q8 monta un motor TFSI V6 de gasolina, de 3.0 litros, que entrega 340 caballos de potencia.
Cuando se anunció la llegada del Q8, muchos pensamos que por ser el mayor en numeración, también lo sería en tamaño; es decir, más grande que el Q7. Pero no fue así. La marca de los aros hizo un trabajo extraordinario en la evolución del Q7 para dejarlo en su actual posición como el SUV más grande con capacidad para 5 o 7 puestos, según el mercado donde se comercialice, y posicionar el Q8 como un SUV especial con estética cupé.
El nuevo Q8, que ya se comercializa en Colombia con un precio de $260.000.000, es siete centímetros más corto que un Q7, pero es más ancho y ofrece una estética robusta, con una imponente presencia en el camino.
Con 4,98 m de longitud, 1,99 m de ancho y 1,70 m de alto, y una distancia entre ejes de casi 3 metros, ofrece un generoso espacio interior que supera al de sus rivales más directos.
Lo que innegablemente sí es superior es la tecnología. Al tratarse de un modelo de nuevo desarrollo, el Audi Q8 se beneficia de los sistemas actuales, como el virtual cockpit y el sistema de info-entretenimiento.
1. LUJO EN TERRENO DESTAPADO
El Audi Q8 monta un motor TFSI V6 de gasolina, de 3.0 litros, que entrega 340 caballos de potencia y un increíble torque de 500 Nm (50,98 kg-m) disponible desde bajas revoluciones (1.370 rpm). Al ser un modelo que pesa en conjunto de 2.200 kg, su relación peso/ potencia es de 6,5.
Como novedad, todos los motores que montará el Q8 incluyen la tecnología Mild-Hybrid (MHEV). ¿En qué consiste? Se trata de un sistema eléctrico de 48 voltios que incorpora una batería de iones de litio y un alternador BAS que sirven de motor de arranque o motor eléctrico para apoyar la combustión en determinados momentos.
¿Qué hace? Durante el frenado puede recuperar hasta 12 kW de la energía que se almacena en la batería, pero también concede largas fases de circulación en modo de marcha por inercia con el motor desactivado, permitiendo que el sistema start-stop entre en funcionamiento a 22 km/h. El Q8 no es solo lujo para transitar por caminos asfaltados, también puede usar su frac para aventurarse por caminos inhóspitos.
Su diferencial central mecánico se encarga de transferir las fuerzas a los ejes delantero y trasero en una proporción de 40:60. En caso de ser necesario, puede incrementar la fuerza en el eje con la mejor tracción.
Además, dispone de 25,4 cm de altura sobre el piso y, gracias a los voladizos cortos y al control de descenso de pendientes, le permite sortear obstáculos de alta dificultad. Otro detalle tecnológico que encontramos está en la dirección progresiva (de serie), cuya relación se hace cada vez más directa en cuanto más gira el volante.
Como novedad, la marca puede incluir de manera opcional dirección en todas las ruedas. A baja velocidad puede girar las ruedas traseras hasta 5 grados en dirección contraria a las delanteras para mejorar la agilidad, y a más velocidad en el mismo sentido que las delanteras para una mejor estabilidad.
Por otro lado, Audi ofrece de manera opcional la suspensión neumática adaptativa con ajuste de confort o deportivo, que puede variar la altura de la carrocería hasta en 90 milímetros, dependiendo de la situación de conducción y de las preferencias del conductor.
2. ESTILO DIFERENTE
Sin duda, el punto fuerte del Q8 es su frontal. Gracias a su imponente parrilla octogonal Singleframe 3D adquiere un aire muy poderoso. Solo véalo por el espejo retrovisor de su auto mientras se aproxima para darse cuenta de su majestuosidad.
A esto se suman grandes entradas de aire, línea del techo que desciende hacia los pilares D ligeramente inclinados, robustos pasos de rueda, rieles de techo y rines de aluminio de 20 pulgadas. En suma, tenemos un vehículo ‘brutal’.
Los faros LED son de serie, pero también está disponible como opción la tecnología HD Matrix LED. Las luces diurnas tienen un estilo tridimensional, así como las luces traseras. Al igual que en el Audi Quattro original, esta tira de luz se subraya por una moldura negra.
3. DETALLES SELECTOS
Su interior atrapa a primera vista, el techo panorámico de vidrio que proporciona un ambiente lleno de luz. Los sistemas de ajuste de las sillas delanteras son el tope de la marca en el mundo e igualmente presenta un espacio diseñado para que los ocupantes de la parte trasera viajen con la mayor comodidad.
También incluye molduras de entrada (de aluminio) iluminadas con inserciones de diamante gris plata, que presentan un contraste excepcional con la barra horizontal piano negra de la consola central; de esta forma se apela al espíritu de la marca a lo largo de los años. Sin duda, el Q8 representa un avance significativo en el segmento Premium en cuanto a
lujo, elegancia y tecnología.
4. CARGADO DE TECNOLOGÍA
Si el diseño exterior impacta, también lo hace el interior. Gracias al sistema de respuesta táctil MMI se puede acceder a la mayoría de las funciones mediante dos grandes pantallas integradas perfectamente entre tablero y consola. ¡Todo un espectáculo! La pantalla superior de 10,1 pulgadas se utiliza para controlar los sistemas de info-entretenimiento y de navegación, mientras que la inferior de 8,6 pulgadas permite al conductor manejar las funciones de climatización, confort, entre otras. La innovación del sistema radica en que al momento de tocar algún mando con el dedo, un clic táctil y acústico confirma cuando la función está activa.
Todo es digital como se muestra en el Audi virtual cockpit, cuya pantalla de 12,3 pulgadas de alta resolución puede cambiar entre dos tipos de vista a través del volante multifunción. Adicionalmente, incluye de manera opcional un head-up display con proyector de la información Entre los dispositivos de avanzada encontramos control de crucero adaptativo, asistente de eficiencia, asistente de cruce, sistema de advertencia en cambio de carril (lane change warning), sistema de advertencia de acera (curb warning) y cámara 360 grados.
El sistema de audio firmado por Bang & Olufsen proporciona un fascinante sonido 3D en las cinco plazas. La música se reproduce exactamente como fue grabada en la sala de conciertis.
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