Señales de tránsito, más importantes de lo que cree
Es importante que todos los ciudadanos se concienticen de que las señales no son una medida restrictiva.
El objetivo de las señales de tránsito es regular la circulación de los diferentes actores viales en las ciudades y carreteras del país. Sin embargo, es muy frecuente que tanto conductores como peatones pasen por alto estas señalizaciones ocasionando incidentes que habían podido evitarse con el cumplimiento de las normas.
En Colombia, según el SIMIT, la principal infracción cometida en 2017 por los conductores de vehículos es conducir a velocidades superiores a la máxima permitida, lo que en la práctica se traduce en el incumplimiento de las señales de tránsito que demarcan las velocidades y por ende en un riesgo importante para la seguridad vial.
Es importante destacar que las señalizaciones no son solamente para los conductores de vehículos, motos y bicicletas sino también para los peatones. Semáforos, cebras y pares, entre otros, son algunas de los elementos que en la mayoría de los casos, actores viales ignoran por considerarlas irrelevantes. Sin embargo, hay otros factores culturales y educativos que inciden en que los colombianos no tengan una buena cultura vial.
Una constante sensación de afán, transitar bajo una conducta de estrés, realizar actividades de manera simultánea (como hablar o chatear por celular) y el pensamiento individual sobre el colectivo, son algunas de las conductas más recurrentes a la hora de que peatones y conductores infrinjan la señalización. Incluso en países desarrollados muchas de estos malos hábitos de convivencia están reglamentados de manera severa, lo que ayuda en la disminución en los sucesos viales.
¿Qué se debe hacer?
Lo primero es entender que las señales de tránsito son una herramienta de convivencia que les permite a todos los actores viales salvaguardar sus vidas y las de las personas que los rodean.
De igual forma, es importante que todos los ciudadanos se concienticen de que no son una medida restrictiva, sino que por el contrario es un sistema mundialmente estandarizado que trae muchos beneficios cuando se cumple adecuadamente: reduce tiempos de desplazamiento, minimiza incidentes, aporta a la sana convivencia.
En el país, la resolución 1885 de 2015 del Ministerio de Transporte es la que adoptó el Manual de Señalización Vial que se encuentra vigente; en caso de duda o interpretación del alguna señal presente en la vía, se puede consultar fácilmente para conocerla.
Así mismo, se requiere que las compañías del sector automotriz, las entidades gubernamentales y las academias trabajen de la mano para poder reforzar el conocimiento de las señales de tránsito, puesto que, en muchas ocasiones, estos símbolos son irrespetados por desconocimiento.
“Es importante realizar un trabajo educativo con todos los actores viales a fin de que puedan interiorizar la relevancia del respeto por las señales de tránsito, no como una medida restrictiva de las autoridades, sino como una herramienta de cultura ciudadana que aporta al bienestar común. Desde Auteco, estamos comprometidos en construir constantemente esta conciencia vial y en generar espacios de capacitación para reducir la brecha de desconocimiento que existe sobre las señales de tránsito” afirmó Analucía Isaza, Gerente de Comunicaciones y Sostenibilidad de Auteco.
REVISTA TURBO