Motos híbridas: ¿un mercado que necesita mayor atención?

Hay varias razones para creer que este tipo de tecnología es una opción confiable y eficaz para la transición hacía las motos 100 % eléctricas.

BOGOTÁ. Aunque todavía no se consolida como una tecnología sólida en este segmento, son muchas las expectativas que se tienen sobre las motos híbridas, que buscan, al igual que ha pasado en los carros, combinar las tecnologías eléctrica y de combustión.

Por ahora son pocos los fabricantes que le apuestan a las motos híbridas, debido a su alto costo y al vuelco que ha dado la industria hacia las motos 100 % eléctricas. Sin embargo, hay varias razones para creer que este tipo de tecnología es una opción confiable y eficaz para la transición.

Una tecnología para la transición

Aunque las motos eléctricas apuntan a ser el futuro de la movilidad a dos ruedas, es necesario que las motos híbridas cobren protagonismo importante en el proceso de transición de las energías con base en combustibles fósiles a las 100 % renovables (eléctricas).

Lo anterior se debe a dos factores importantes: Por un lado, está la favorabilidad, ya que las personas no compran motos eléctricas debido a su poca potencia. Las híbridas son un buen comienzo para adaptar a las personas a esta clase de vehículos.

Por otro lado, el desarrollo y tecnología en el campo de las motos híbridas también trabaja en motores más compactos que, a través de la combinación de varias energías, puede revolucionar la industria de las motos hacia campos de eficiencia nunca vistos.

Motores de alto rendimiento

1. Los motores híbridos funcionan mediante un ciclo de retroalimentación en el que un motor eléctrico recibe algo así como una carga adicional de la combustión que genera un motor convencional.

2. Esta sinergía de propulsiones (eléctrica y de hidrocarburo) permite que el motor no genere tangos gases contaminantes y, al mismo tiempo, no compromete la velocidad de la moto, como si ocurre en los modelos eléctricos.

3. Al ser impulsado por dos tipos de energía, en vez de una, no requiere de altas dosis de gasolina para funcionar, lo que se traduce en ahorro de dinero.

*Con información de Q’hubo Bogotá