Conozca los pasos para cambiarle el color a su auto
Vale anotar que la correcta elección del sitio en donde se hará el cambio de color resulta definitiva.
Por querer personalizar sus autos o por simple capricho, muchos propietarios deciden cambiar el color original de sus vehículos por uno de tono distinto que complazca sus preferencias.
Lo primero a mencionar sobre esta práctica es que es poco recomendable por implicar un complejo y costoso proceso en el que se deben remover una buena parte de los elementos de cabina (asientos, tapizado, paneles puertas, cubierta piso, etc.) algunos del habitáculo de motor y empaques del coche, entre otras partes, para obtener un total repintado.
De todas formas, y así sea ejecutado por expertos el cambio de tono de un auto deja ‘testigos’ del color anterior en piezas solo posibles de cubrir en las sofisticadas cabinas de los fabricantes en donde se pintan estando totalmente ‘desnudos’.
El inconveniente de lo anterior se presenta más tarde, al querer vender el auto, ya que cualquier perito, ‘retomador’ de vehículos o prospecto comprador, que revise minuciosamente el coche, va a encontrar estos mudos pero inexorables ‘testigos’ del color anterior, que terminan desvalorizando el coche o suscitando sospechas de una reparación por accidente, por ejemplo.
A esto hay que agregarle el burocrático proceso que se debe seguir para obtener la autorización del cambio de color por parte de la Secretaria de Tránsito correspondiente.
Entre los trámites a cumplir por el propietario para obtener la respectiva tarjeta de propiedad con el nuevo color de su auto están los siguientes requisitos relacionados a manera de guía:
-Las personas naturales o jurídicas que quieran realizar el cambio de color de un vehículo deben estar debidamente inscritas en el sistema Runt.
– Los documentos de identidad válidos para realizar los trámites son: cédula de ciudadanía o contraseña válida para colombianos mayores de edad, tarjeta de identidad o contraseña para menores y en caso de los extranjeros mayores de edad estos deben mostrar su cédula de extranjería o contraseña certificada o pasaporte vigente.
– Si el trámite(s) va a ser realizado por un tercero, este deberá estar registrado en el sistema Runt y presentar contrato de mandato, poder general o poder especial en el que conste la autorización para ejecutar las gestiones pertinentes. Si la autorización se lleva a cabo mediante poder especial, este debe ser hecho mediante presentación personal ante un notario público.
– Cuando se trata de personas jurídicas, se debe anexar original o fotocopia del certificado de existencia y representación, expedido por la Cámara de Comercio, la Superintendencia Bancaria o de Sociedades, Alcaldía o ente público, con no más de 90 días calendario de expedido.
– Completar el formulario de solicitud de cambio de color. Este formulario debe ir acompañado de las respectivas improntas.
n Presentar Soat, certificado de revisión tecno-mecánica vigentes y original de la licencia de tránsito (tarjeta de propiedad) o respectiva denuncia por pérdida.
– Anexar paz y salvo por concepto de multas e infracciones de tránsito.
– Estar al día con los impuestos del vehículo.
– Pagar los derechos de trámite en una entidad bancaria autorizada.
Una vez cumplidos estos inexorables requisitos el propietario debe buscar un centro especializado en pintura, ojalá con cabina, que ofrezca buena calidad de trabajo y garantía del mismo.
En este sentido, vale anotar que la correcta elección del sitio en donde se hará el cambio de color resulta definitiva, si se tiene en cuenta que para llevar a cabo este proceso es preciso desarmar el auto para dejar mera carrocería y poder pintar la gran cantidad de partes ocultas a los ojos.
De todas maneras, es preciso recalcar y tener muy en cuenta que por profesional que sea el trabajo de cambio de color de un vehículo hecho en un centro de servicio especializado o en el mismo concesionario de la marca del coche, jamás, podrá igualar la calidad del proceso de pintura en fábrica en donde el auto se pinta en sus meras ‘latas’, utilizando equipos y tecnología de última generación de tan alto costo y desarrollo, que resultan imposibles de adquirir para los propietarios de los centros de servicio especializados en pintura automotriz.
Datos de interés
Una pintura de buena calidad garantiza mayor duración y mejores acabados, que una pintura de dudosa procedencia. En este caso el viejo y conocido dicho de que lo ‘barato sale caro’ viene como anillo al dedo.
El profesionalismo, experiencia y juicio de los operarios son herramientas más importantes que la cabina, compresor o la misma pintura con que se pinta un auto.
La inadecuada reinstalación de elementos del coche removidos para realizar el proceso de cambio de color trae como secuela esos molestos ruidos conocidos como ‘pajaritos’.
REVISTA TURBO
