Bogotá tendrá transporte masivo con propulsión eléctrica

Como un hecho histórico la capital tendrá en el 2020 la segunda flota más grande de buses eléctricos de América

La Empresa de Transporte del Tercer Milenio Transmilenio S.A. adjudicó y eligió por licitación pública el pasado 14 de noviembre, a los concesionarios proveedores y operadores de 379 buses eléctricos que formarán parte del Sistema Integrado de Trasporte Público –SITP-, siendo las localidades de Usme y Fontibón, las primeras beneficiadas.

Esta flota, que iniciará su operación en septiembre de 2020, convierte a Bogotá, en la segunda ciudad de Latinoamérica con la flota eléctrica de buses BYD más grande del continente y una de las más extensas del mundo.

Colombia lideraría la carrera por el medio ambiente junto con los 64 buses 100% eléctricos de Medellín, con un total 443 eBuses de la marca, que actualmente es líder a nivel mundial en la fabricación de tecnologías de transporte cero emisiones.

Características

Los buses BYD de 80 y 50 pasajeros, responden a los requerimientos solicitados por la ciudad y superan todas las normas de seguridad nacional e internacional. Estos vehículos con tecnología de punta, vienen equipados con cámaras de seguridad internas y externas, cámaras de reconocimiento facial de conductores, elevador para personas con movilidad reducida y universalmente accesibles (incluyendo usuarios con discapacidad, visual y auditiva).

Además, puertos USB, WI-FI, contador electrónico de pasajeros que ingresan y salen del vehículo, y equipos de audio y video para información institucional y del Centro de Emisión Radial del Sistema, entre otros.

Eficiencia

La batería de hierro fosfato, con que vienen equipados, logra una autonomía de más de 260 kilómetros con una sola carga, suficiente para realizar la operación de un día sin recargas adicionales, y se carga al 100% en menos de 2 horas.

Su tecnología incorporada, desempeño y equipamiento, entrega todo lo necesario para que los usuarios y el operador del bus, se transporten de manera cómoda y segura todo el tiempo. Cabe destacar también la ausencia total de ruido, vibración y cero emisiones contaminantes en comparación a la que producen los buses con motores de combustión interna (diésel y gas).

Se calcula que en su primer año de operación, esta flota dejará de emitir 21.900 toneladas anuales de gases C02 y 526 kilogramos anuales de partículas contaminantes PM 2.5. En cuanto a costos de operación, el ahorro aproximado será de un 60% menor que los buses a combustión.

REVISTA TURBO