¿Nitrógeno o aire para sus llantas?
El aire es la más común, no tiene costos y en cualquier taller de mecánica lo pueden brindar.
Al momento de inflar las llantas de su vehículo existen dos posibilidades en el mercado: el aire y el nitrógeno. La primera es la más común, no tiene costos y en cualquier taller de mecánica lo pueden brindar. El nitrógeno trae algunos beneficios, pero si desea usarlo deberá aumentar el dinero que invierte en su vehículo al mes.
Nevardo Porras, integrante del departamento de ingeniería de Bridgestone Colombia, manifestó que no son muchas las diferencias entre ambos gases. Advirtió que incluso cuando se infla una llanta con aire, este está compuesto en un 78% por nitrógeno, un 21% de oxígeno y un 1% de otros elementos.
“Un menor desgaste de las llantas, lo que provoca menos consumo de combustible”, este es un beneficio del nitrógeno que menciona Carlos Huertas, gerente de Casa López. Los técnicos del Centro de Servicio Manolito coinciden con Huertas, y agregan que para aumentar el rendimiento del nitrógeno lo ideal es hacerlo en llantas de marcas reconocidas.
Los expertos explican las ventajas y desventajas y dan algunas recomendaciones.
Nitrógeno
Ventajas
– No contiene vapor de agua.
– Menos susceptible a los cambios de temperatura, lo que significa una presión constante.
– Sin deformaciones en la pisada.
– No retiene el calor.
– Prolonga la vida útil de la llanta.
– Mejor agarre durante el manejo.
Desventajas
– Es un gas que no está disponible en muchas zonas del país.
– Los costos para inflar una llanta con nitrógeno aumentan. En promedio, las cuatro pueden valer $15 mil.
Aire
Ventajas
– La mayoría de talleres lo dan gratis.
Desventajas
– El aire viene acompañado de humedad, lo que puede oxidar los rines después de un tiempo, aunque esto pasa en modelos antiguos. En la actualidad los rines son hechos de materiales diseñados inmunes a la oxidación.
– Los cambios de temperatura pueden cambiar la estructura de la llanta y aumentar la presión.
Recomendaciones
– Verificar la presión de las cuatro llantas periódicamente (dos veces al mes). Estas revisiones se deben hacer cuando el carro está frío.
– Si va a utilizar nitrógeno por primera vez, acuda a un sitio especializado.
– Cada fabricante recomienda una presión determinada para un vehículo. Viene marcada en una calcomanía en la puerta.
– La presión adecuada en un carro está entre 30 y 34 psi, medida en la que se expresa.
– Cada cuatro meses se debe hacer la revisión de alineación y balanceo.
– El nitrógeno no es recomendable para las motos, debido a que no hay tanto agarre.
– El aire y el nitrógeno son compatibles, pero sepa que si su carro está inflado con el segundo y tiene que usar aire, se perderán los efectos del nitrógeno.
COLPRENSA / LA PATRIA